Si llueve llueve,no hay más ciencia que esa, aceptar.
El río siempre encuentra su canal.
Los osos saben cuando dejar de invernar.
Y yo se que puedo saber cambiar.
No entiendo toda mi vida.
No acepto mi pasado del todo.
Pero dejo a mi sentir fluir.
No tiene caso buscarle la lógica a eso que me hace daño.
Las cosas pasaron por algo.
Por algo se fueron.
Por algo surgieron.
Martirizar mi vida es el castigo que llevo poniéndome sola desde hace años.
Culparme de eso que no controlo como la penitencia de mi vida.
Pensar que mi personalidad es el pecado que no puedo herradicar.
No quiero saber toda la verdad del mundo.
No tiene caso.
Pero a la larga entiendo que dejar de forzar las cosas es más sano.
A la mala entendí que tengo demasiadas cosas buenas para solo pensar en las malas.
Tengo mucho de lo que vivir.
Y tienes mucho que hacer aun en tu vida para dejar como principal a eso que te duele.
No creo sanar aun.
Pero quiero intentarlo.
Tengo una nueva oportunidad de elegir ver lo bello que la tierra ofrece.
Respeto a la muerte, tanto como a la vida.
Y se que mi camino pese a los baches es lindo.
Me han pasado cosas tan buenas.
No solo malas como llevo tiempo creyendo.
Amo quien soy ahora, con mis altas y caídas.
Tengo muy buenos soportes.
He tenido la dicha de una familia que día a día me demuestra lo que es el amor.
Porque he escogido bien a mis amigos en los últimos tiempos.
Así que si, si va a llover que llueva, porque si no tengo paraguas aprenderé a bailar bajo la lluvia sin temor a enfermarme.
Somos lo que pensamos, nos convertimos en lo que pensamos y actuamos de acuerdo a lo que creemos, la única forma de cambiar eso es entonces entender tu pensamiento y actuar al respecto.

No hay comentarios.:
Publicar un comentario